Esta imagen de todo el cielo muestra 22 meses de datos de rayos X registrados por la carga útil del Explorador de la Composición Interior de las Estrellas de Neutrones (NICER, por sus siglas en inglés) de la NASA —que viaja a bordo de la Estación Espacial Internacional— durante sus barridos nocturnos entre los diferentes objetivos a los que apunta.
Las principales metas de NICER requieren que esté apunte hacia las fuentes de energía cósmica y siga su recorrido, a medida que la estación espacial hace su órbita alrededor de la Tierra cada 93 minutos. Pero cuando el Sol se pone y la noche cae en este puesto de avanzada orbital, el equipo de NICER mantiene activos sus detectores mientras el instrumento pasa de un objetivo a otro, lo que puede ocurrir ocho veces durante cada órbita.
Cada arco marca el recorrido de los rayos X, así como los impactos ocasionales de partículas energéticas, que son captados durante estos movimientos nocturnos. El brillo de cada punto de la imagen es el resultado de estas contribuciones, así como del tiempo que NICER ha dedicado a mirar en esa dirección. Un resplandor difuso satura de rayos X el cielo, incluso lejos de las fuentes donde se origina el brillo.